pues es una forma de "purificarse" espiritualmente hablando, pero no solo ellos hacen este tipo de rituales los judios por ejemplo tienen el Shabat
El Talmud en el tratado Shabat, capitulo 7, mishna 2 trae una lista de las 39 categorias de actividades prohibidas en Shabat. Estas se derivan de los diferentes tipos de trabajo que eran necesarios para construir el Tabernáculo, conocidos como Avot Melajá. Estas son:
Plantar
Arar
Cosechar
Atar poleas acanaladas
Trillar
Aventar
Seleccionar
Moler
Tamizar
Amasar
Hornear
Trasquilar lana
Lavar lana
Batir lana
Pintar lana
Hilar lana
Tejer
Hacer dos lazos
Unir dos hilos
Separar dos hilos
Amarrar
Desamarrar
Coser
Romper
Atrapar un animal
Matar a un animal
Despellejar a un animal
Curtir pieles
Raspar pieles
Marcar pieles
Moldear pieles
Escribir dos o más letras
Borrar dos o más letras
Construir
Demoler
Apagar fuego
Prender fuego
Tocar un instrumento musical
Terminar la preparación de un utencilio nuevo
Transportar un objeto de areas públicas a areas privadas y vice-versa, o cargarlo 4 cúbitos o mas en un area pública.
De estas categorias principales (Avot) se derivan otras actividades similares (toldot), por ejemplo dentro de la categoria de "hornear" se derivan prohibiciones de cocinar, freir, etc. Aparte de las actividades prohibidas por la Torá, existen algunas prohibiciones de origen rabínico como el utilizar o mover un objeto que se usa para trabajos prohibidos al que se le llama muktze; y el pedir a una persona no judia que haga un trabajo prohibido dentro de ciertas circumstancias.
Y en el cristianismo tenemos los Ejercicios Espirituales de San Ignacio de Loyola,son una breve serie de meditaciones, oraciones y ejercicios mentales (el libro está disponible en varios formatos) diseñados para ser realizados por un período de 28 a 30 días. El libro tiene aproximadamente 200 páginas. Aparentan haber sido escritos con la intención de aumentar la experiencia personal de fe en una manera que incluye matices claramente Católicos. Por este nombre se entiende todo modo de examinar la conciencia, de meditar, de razonar, de contemplar; todo modo de preparar y disponer el alma, para quitar todas las afecciones desordenadas (apegos, egoísmos, ...) con el fin de buscar y hallar la voluntad divina.